"Cómo elegir una buena clínica de fisioterapia."
Para algunas dolencias o procesos de rehabilitación es importante contar con los servicios de un especialista en fisioterapia, ya que en algunos casos, puede ser fundamental para nuestra recuperación, y en otros casos, hará que este proceso sea menos duradero, más cómodo y sobre todo, más efectivo.
Existen una gran cantidad de especialistas en este tipo de intervenciones, sin embargo, hay que tener en cuenta varios factores para determinar cuál es la más correcta y apropiada para nuestras necesidades.
Qué determina una clínica de fisioterapia de calidad. En primer lugar, los profesionales de la clínica han de estar colegiados, lo cual demostrará que se trata de profesionales con las capacidades, los conocimientos y la formación necesaria para ejercer su labor. Se trata de un profesional de la sanidad, y por ello, este aspecto es importante, por lo que comparte este requisito con médicos, auxiliares y enfermeros de centros de salud y hospitales.
Antes de empezar con el procedimiento de fisioterapia, el paciente debe ser evaluado mediante una valoración inicial, con la que detectar el problema y analizar el modo con el que debe ser intervenido para su mejora. Para ello es necesario contar con unas instalaciones y con la maquinaria adecuada, que solo se pueden encontrar en las mejores clínicas.
En el caso de que los tratamientos de fisioterapia no sea lo que necesitas, o bien, no sea lo único que necesites para tu recuperación, una buena clínica contará con un equipo profesional honesto que te derivará a otros profesionales cuando lo considere oportuno para tu salud.
En España, el precio de las sesiones oscila entre los 30 y los 50 €, dependiendo de la clínica, pero no hay que confiar en clínicas que ofrecen sus servicios por precios inferiores o superiores.
Tipos de fisioterapia
Según las dolencias o los problemas de tu cuerpo, los servicios de fisioterapia serán distintos, dependiendo de una especialización u otra.
En primer lugar, la fisioterapia deportiva es aquella destinada a las personas que realizan deporte de manera habitual. No solo tiene como fin tratar lesiones, sino también prevenirlas, por lo que en algunos casos es recomendable asistir a estos servicios de fisioterapia aunque no se padezcan síntomas.
La fisioterapia neurológica está relacionada con enfermedades como ictus, Parkinson, parálisis cerebral, etcétera. Es un tipo de rehabilitación que busca mejorar la fatiga, la postura y el equilibrio, así como aprender a controlar los movimientos espasmódicos derivados de estas enfermedades.
La fisioterapia pediátrica es aquella que está dirigida a pacientes infantiles con problemas neurológicos o traumatológicos, niños con problemas respiratorios, etc.; luego, está la fisioterapia geriátrica, que está dedicada a pacientes de avanzada edad.
La fisioterapia respiratoria se encarga de las patologías que hayan afectado o alterado el proceso de respiración. Esta modalidad está destinada a todo tipo de pacientes, desde jóvenes y adultos, a ancianos que por alguna enfermedad crónica hayan visto afectado su sistema respiratorio.
La fisioterapia traumatológica es la más común, y es la que trata las lesiones de los músculos y los huesos. Se trata de una especialidad que ayuda a tratar las hernias discales, fracturas, roturas de ligamentos, esguinces, luxaciones o contracturas, entre otras muchas posibilidades.
La fisioterapia ortopédica es aquella que tiene como fin tratar las disfunciones artro-neuro-musculares.
Teniendo en cuenta todos estos aspectos, podrás darte cuenta de si necesitas la asistencia médica de un fisioterapeuta, además de saber cómo elegir una clínica de calidad.
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